Como dice Silvio, una de nuestras más grandes y mejores influencias, "hoy, cantando solo con la Luna, ya que se hizo puta la fortuna"... Y como Silvio, y como Edgardo, trovamos, o buscamos trovar, trovamos buscando, sin alarde... no podemos y no queremos alardear, porque nuestro humilde canto, tiene más corazón que técnica, tiene más intuición que práctica, tiene más pasión que ensayos... Cantamos porque hay cosas que ya fueron dichas y no se escuchan lo suficiente estos días... Y al buscar en viejas melodías, de tantas latitudes distintas, nos sentimos como en casa, y al pedir prestadas esas palabras, nos llenamos de fiebre y nos sentimos mejor que nunca, casi satisfechos. Casi. Nunca vamos a estar completamente satisfechos. El día que estemos completamente satisfechos, dejaremos de cantar. Eso somos, búsqueda de canciones, canciones sobre búsquedas, bocetos sobre una página celeste, trovadicta, Trovardiente.
