"Hoy va a ser el
día, en que voy a ser escuchada" piensa Angélica frente a todo el
auditorio. Y sin temblor en su voz, dejó perplejo a todo un publico expectante
por las novedades de la causa. En la esquina de Yrigoyen y Perú fue la cita,
12hs, legislatura porteña. Primera vez, Angélica frente a la prensa. En
un cara a cara, esperado durante cuatro años de complicada batalla contra la
sordera intencional de los medios masivos de comunicación. Ella, madre del
dolor, mujer de pie que lucha, que una vez asesinado su hijo, fue blanco de la
misma violencia institucional cuando le inventaron una causa; cuando la
golpearon policías; cuando intentaron humillarla para detener su cruzada; cuando la insultaban o la amenazaban. Firme, de frente y junto a Nora Cortiñas,
Pablo Pimentel, Vanesa Orieta, Luciana Pol (CELS), Pablo Ferreyra y junto con los
abogados de la causa, Juan Manuel Combi y Adriano Agreda, se realizó la
conferencia de prensa denunciando las tantas y burdas irregularidades de la
causa.
"A mi hijo lo
seguían matando cada vez que no me daban información cuando iba a
buscarla", comentó Angélica en su relato. Agregamos que no solamente no le
daban datos precisos sobre el paradero de su hijo, sino que la desviaban con
"pistas falsas". Fueron años de duras penas en la búsqueda de verdad
y justicia por la muerte de Kiki Lezcano. Vemos, que cada vez que
se sigue profundizando la politización de este caso de gatillo fácil (uno más que se
agrega a la lista de victimas que son día a día violentados por la policía),
más se deschaban las prácticas de nuestro sistema "de seguridad" y el
encubrimiento judicial. Allí estuvimos, en la Legislatura porteña,
organizaciones sociales, familiares de
victimas de los derechos humanos, funcionarios politicos, periodistas del palo,
presentes al cumplirse 4 años del asesinato de Jonathan Kiki Lezcano y Ezequiel
Blanco.
Romper el cerco
informativo, simboliza, desarmar los limites de la prensa hegemonica. Y el
gatillo fácil está, cercado por concepto. Quebrantar la opinion establecida -de
quiénes formaron precisamente aquella opinión- fue nuestra tarea en el día de
hoy. Comienza a agrietarse este solido muro mediatico para el caso de Kiki
Lezcano. Se nos vienen los recuerdos de festivales por su vida, de los actos y
movilizaciones, de las kermesses en el barrio, de los dias del niño junto a los
pibes y pibas de la veinte, de las ollas populares, los apoyos escolares, los
tallercitos de arte y los peloteos en el mural de la casita del Kiki. Angélica
fue quién protagonizó e impulso todo esto: "Yo nada más sabía de criar
hijos -enfatiza-, tuve que aprender a luchar".
Una vez más, un grito de
denuncia: "Ni siquiera conocí la cara del juez -continúa-. Los
únicos que se acercaron a mí fueron jóvenes de la edad de Kiki, que me enseñaron
a luchar y salir a la calle". Pablo Ferreyra afirma "Cuando
hablamos de democratización de la Justicia, tenemos que
pensar y profundizar en la celeridad de los procesos. Tanto en el caso de
Luciano Arruga como en el de Kiki no hay imputados, esto no colabora en reparar
el dolor de las familias".
"Sabemos que en los barrios pobres -expone angélica- no va ningún medio,
no va nadie. Es tan natural y por algo será. Por algo lo hicieron desaparecer.
Ese 'por algo sera' hay que sacarlo de nuestras bocas".
Efusivas palabras para nuestro cierre de crónica. Y como bien precisa Pablo Pimentel, "los
derechos humanos, tienen una sola definición, se defienden o se violan, no hay
termino medio, y en estos casos, se están violando". Simple gente, quién
lea, sabrá lo que tiene que hacer el sábado 13 de julio a las 14hs. Lugar,
Villa 20, Lugano. Jornada en defensa de los derechos humanos. Los y las esperamos.